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Expertos de diversas partes coinciden en estimar la gran importancia de la existencia y laboreo de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Mipymes), cuyo Día  Mundial se celebra el 27 de junio, sobre todo por su influencia en los objetivos de los planes de Desarrollo Sostenible, una asignatura pendiente, y porque deben facilitar el acceso a los créditos y a la financiación.

Un tema muy actual a nivel planetario es este, sobre todo para las economías en desarrollo, en tiempos en que muchos se afanan en la recuperación tras los álgidos años de la pandemia de Covid-19.

Entonces muchos agradecen a Argentina la iniciativa de promover esa jornada de reconocimiento y estímulo a las popularmente llamadas Mipymes, ante la Asamblea General de Naciones Unidas, que fuera aprobada con entusiasmo y aclamación el 6 de abril de 2017.

Y aunque los formatos de las micro, pequeñas y medianas entidades productivas varían de un país a otro, hay  factores que las identifican y las hacen adquirir esa categoría e importancia, común a todas, dentro de sus economías nacionales específicas.

Igualmente, estudiosos consideran que esas estructuras económicas son influyentes en la reducción de la pobreza, y fomentan el  desarrollo  de nexos internacionales.

Son células de emprendimiento que suelen emplear a un gran porcentaje de trabajadores de sectores vulnerables de la sociedad, como son los casos de mujeres, jóvenes y personas desfavorecidas.

Cuba no está apartada de esa corriente mundial  que busca dinamizar los niveles de su producción e incrementar la oferta de productos, en medio de obstáculos impuestos por las incrementadas medidas de presión del bloqueo económico estadounidense.

Una información emitida por autoridades competentes afirma que hasta el 30 de mayo de 2023 en el país funcionan 8 303 Mipymes, creadas a partir del inicio de ese proceso  desde septiembre de 2021.

Las  micro, pequeñas  y medianas empresas coexisten con la empresa estatal socialista como actor principal de los proyectos macroeconómicos. Por lo cual, tanto autoridades como actores consideran que no hay contradicción alguna, sino beneficiosa complementación, en una sociedad que planifica su estilo de trabajo, en aras de mayor eficiencia y productividad.

Con dificultades generadas por las carencias,  hay decisión de que las estructuras mencionadas nos acompañen, crezcan y tengan el futuro que merecen, para el bien común.

Noticieros, redes sociales y otros espacios que matizan la cotidianidad nacional  reflejan la ingente actividad de las Mipymes, que ya se hace sentir. ¡Feliz día!