CubaPLUS Magazine

Museo Parque Nacional La Demajagua, una cita con la historia

Por: Alina Veranes
10 Oct 2022
Museo Parque Nacional La Demajagua, una cita con la historia

Por los días cercanos al 10 de octubre, día del grito de independencia y de inicio de la campaña libertaria que por 10 años se libró en los campos cubanos, el Parque Nacional La Demajagua, cerca de una comunidad rural del mismo nombre, a unos 13 km de la ciudad oriental de Manzanillo, hace revivir con mayor fuerza el orgullo de los nacidos en esta tierra, preciados de ser bravíos.

Fue el 10 de octubre de 1868 cuando el patricio y abogado bayamés Carlos Manuel de Céspedes dio la libertad a sus esclavos y al frente de un ejército popular organizado prestamente, comenzó la guerra contra el colonialismo español desde el pequeño ingenio azucarero Demajagua, perteneciente al llamado Iniciador, hoy también venerado por todos los cubanos como Padre de la Patria.

La industria era próspera cuando Céspedes la abandonó para irse a la manigua redentora - monte intrincado, según los criollos- y no estaba en declive, como se propagó por mucho tiempo. Pero muy pronto fue cañoneada desde el mar por un navío español y destruida, quedando solo restos de alguna maquinaria, donde hubo una comunidad agraria. Algunos patriotas pusieron a salvo, bajo tierra, su histórica campana, la que diera los primeros toques de rebato por la libertad de la Isla antillana.

Hoy convertido en un bello Parque histórico, en un medio natural, allí radica un interesante museo. La Demajagua comparte con el Cementerio Patrimonial Santa Ifigenia, de Santiago de Cuba, el honorable epíteto de Altar de la Patria, aunque por motivos diferentes, pero entrelazados.

En manos de Carlos Manuel desde 1866 el ingenio contaba con una máquina de vapor moderna, una dotación de 53 esclavos, y además reforzaban la fuerza laboral 60 asalariados, pues el ilustrado dueño estaba al tanto de las formas más actualizadas para incrementar los rendimientos.

Sin embargo, el objetivo principal de ese hombre grande y otros patriotas de su entorno era hacer la Revolución para librar a Cuba del yugo de España.

Este Parque histórico Nacional es un sitio hoy apacible, donde todavía laten las memorias vibrantes de su historia. La memorable campana, es su símbolo más preciado y la saga de su resguardo y participación en otros hechos patrióticos es hermosa.

También, la vieja catalina del central, aprisionada entre árboles, la explanada verde que lo rodea, junto a otros objetos del Museo invitan a viajar hacia las raíces de la forja de la nación.

Dicen que hasta el sonido de clarinadas y galopar de caballos se escuchan a veces en las madrugadas, si se piensa en esas glorias y se afinan los oídos.

Anuncios
Get it on Google Play